REFERENCIA
Neve, E. (2012). La ciudad que hace música y la música que hace ciudad: hacia la promesa de la ciudad-arte. URBS: Revista de estudios urbanos y ciencias sociales, 2(2), 93-102.
RESUMEN
Este artículo aborda en primera instancia la identidad musical de los lugares, destacando que las ciudades condensan una serie de condiciones que facilitan la producción musical, lo que explicaría el aumento en la cantidad de expresiones musicales en las ciudades, tanto a nivel de inspirar la producción musical como en sus variadas expresiones.
El estudio destaca que las investigaciones señalan que en un comienzo la producción musical era mediada por la iglesia, pero luego se fue improvisando y construyendo en las calles y plazas, dando lugar a nuevas formas, más allá de lo que estaba permitido.
Destaca que las ciudades permitieron también la producción artística en escenarios a un público más masivo, por la proliferación de más espacios para ejecutar y componer música. Asimismo, señala que la ciudad ha permitido, por medio de las redes sociales, circuitos de producción, con ciertas reglas de juego, en las que la música es mediada por intercambios simbólicos, motivo por el cual se evidencia que la creación musical en las ciudades no solo es artesanal o espontánea sino también instrumental, comercial y calculada. Asimismo, destaca que es presionada financieramente para hacerla más atractiva el mercado internacional.
Por otra parte, el estudio plantea que la música puede proveer a las ciudades con material de renovación urbana. En este sentido, se comenta que una parte aborda cómo la música se ha ido presentando en lo urbano y, por otra, cómo la música ha sido generativa de lo urbano, no como fenómeno independiente. En este sentido destaca las formas en que la música inspira a la ciudad.
En ello, señala las prácticas musicales del anonimato y la individualidad y las prácticas en espacios públicos y el potencial urbano que conlleva (efecto territorializante). Por ejemplo, el vínculo entre el turismo y la música en México.
Finalmente, el estudio plantea que ha habido un crecimiento de redes comerciales de producción global de material audiovisual, lo que ha llevado a constantes cambios y readaptaciones. El estudio plantea que esta situación es artística por medio de la composición y de la entonación como generación de lo común, de modo que ambas dan paso a una colectividad, denominada ciudad de los sentidos, ciudad-arte.
Para terminar, se plantea la idea fuerza en relación a que lo artístico no está limitado a espacios institucionalmente asociados al arte, sino que lo artístico se abre como disposición de ser en las ciudades, en lo que se ha denominado la ciudad-arte.